¿COMO?
Debemos esforzarnos continuamente para asegurar unas condiciones óptimas en las naves ganaderas, tanto por el bien de los animales como de las personas.
Un granjero que proporcione el clima y la ventilación adecuados en sus naves minimiza el riesgo de enfermedades y mantiene un entorno estable de alta producción.
En invierno, la ventilación sirve para crear un clima saludable dentro y mantener la emisión de gases no deseados al mínimo.
En verano, el sistema de ventilación elimina el exceso de temperatura de los animales y absorbe el aire dentro de la nave ganadera, creando un efecto de frescor.
Por lo tanto, las exigencias en cuanto al sistema de ventilación son grandes a fin de asegurar la temperatura correcta y una buena calidad de aire y humedad.